martes, agosto 21

LOS REALLITY'S: FÓRMULA PROBADA EN LA TELEVISIÓN


El par de televisoras mexicanas que se caracterizan por su eterna competencia ofrecen al espectador más de lo mismo, pero con otras luces y otros escenarios.

En ambos canales de televisión se busca cautivar a las masas por medio de los reallity's, un género que ya se está volviendo repetitivo en sus contenidos, sin calidad y con una pésima producción detrás de sus conductores estelares.

TV Azteca y Televisa han apostado al morbo, a las críticas superficiaes, al show de variedades disfrazado con una causa social. En sus transmisiones queda claro que no es prioridad el criterio del televidente cuando se trata de mostrar la miseria humana y conmover bajo lemas publicitarios de larga duración.

El Canal 13 de Azteca transmite High school musical, donde un grupo de adolescentes compiten para protagonizar una película que filmará Disney en español. Después de saturar el concepto del reallity musical con La Academia, los directores del área de entretenimiento vuelven a probar con un programa del mismo corte.

La televisora de Ricardo Salinas Pliego, confirma que este tipo de transmisiones está de moda a nivel mundial. En otros países como Holanda, España y Australia las versiones del Big Brother ha sido un golpe total en los niveles de audiencia.

Sin embargo, este tipo de proyectos televisivos dan muestra de que las grandes compañías prefieren seguir con el esquema que les funciona una vez al no atreverse a crear nuevas formas de comunicarse con sus interlocutores sin faltarles al respeto con algo tan probado en ocasiones anteriores.

En el “Canal de las Estrellas” la gente puede ver el programa Buscando a Timbiriche... la nueva banda. Del mismo modo, un grupo de jóvenes concursan para ser parte de la nueva generación de la banda donde surgieran Thalía y Paulina Rubio la cual se desintegrara en el año de 1999.

Por ello el monopolio Televisa les realiza ahora este reconocimiento que al final de cuentas resulta poco entretenido. Durante la desafortunada trasmisión particípan actores y actrices de otras producciones, lo cual refresca la pantalla pero no garantiza que el espectáculo sea valedero. Los invitados sólo intentan cantar y bailar con el pretexto de que es algo divertido sin darse cuenta el ridículo que hacen a nivel nacional.

Deberían apenarse por su escacez de profesionalismo reflejada en los monitores de los mexicanos que sintonizan su señal, sobre todo los dizque periodistas que se dedican a cubrir la fuente de espectáculos, pues en los dos canales parecen haberse estancado en la inmundicia de los programas de relleno que ocupan el tiempo aire de dichas empresas.

Se nota que quienes concursan en los reallity's no son libres de mostrar su creatividad. Muchas veces se ve que son manipulados, controlados y obligados a seguir reglas insulsas. Con guiones que francamente subestiman la inteligencia del público, incluso parecen haber deformando ya el concepto original del reallity show, pues tanto en el canal 2 como en el 13 todo está confeccionado para alabar al escándalo, los chismes, el amarillismo y las relaciones amorosas de los artistas que al final siempre resultan siendo historias ficticias.